Desde el gobierno provincial se brinda acompañamiento a emprendimientos dedicados a la producción de frutos secos y elaboración de aceite de oliva, a lo que se suma el asesoramiento a productores porcinos y forrajeros.

Veinte productores forrajeros de Rincón de los Sauces –que participan del proceso de conformación del Consorcio de Riego de la localidad– recibieron ayer una capacitación y charla informativa a cargo del ministerio de Producción e Industria, a través de la dirección de Forrajes de la subsecretaría de Producción y del Programa Ganadero de Centro PyME-ADENEU.

De esta forma, se generó un primer vínculo para fortalecer el sector forrajero de dicha localidad y acompañar la reconversión productiva local, que apunta también a la producción de frutos secos y carne porcina, y a la elaboración de aceite de oliva.

El encuentro tuvo como objeto brindar una capacitación sobre los distintos tipos de forraje, sus necesidades y sus usos; también se recorrieron cuatro establecimientos para brindar asesoramiento. Este es un primer contacto que luego se irá fortaleciendo a lo largo del año.

Como parte de las acciones para diversificar la economía provincial, muchos vecinos de Rincón de los Sauces comenzaron a volcarse a la actividad productiva agro-ganadera.

Desde hace unos meses, está en conformación el Consorcio de Riego local, a cargo de productores locales, ya que previamente era responsabilidad del municipio. El flamante presidente de la asociación civil conformada por 220 socios, Adelino González, brindó un panorama de la actualidad productiva de la comarca petrolera.

González comentó que hace 14 años comenzó a producir pollos parrilleros y huevos, pero ahora su actividad se ha volcado a la producción de lechones; en la actualidad, posee un lote de 50 cerdas madre.

“Todo lo que se produce se comercializa en la misma localidad”, señala González. Hay unos 60 vecinos dedicados a la producción porcina, además de otros que están incursionando en la producción de pollos, y en menor medida a la producción hortícola, de cerezas, nogales y pasturas.

“La gran mayoría son productores pequeños, pero entre todos hacemos nuestro aporte para abastecer a la localidad. Ahora, hay más de 200 productores, pero todos los días aparecen más personas que quieren producir en la localidad”, manifestó.

Uno de los emprendimientos que más se destaca de la localidad es “María Antonieta”, de la familia Allessi. A 220 kilómetros de Neuquén capital poseen 100 hectáreas dedicadas al cultivo de olivos, con variedades de alberquina, frantoia, arbosana y coratina, y 10 hectáreas destinadas al cultivo de variedades de almendras de origen español, tales como guara y mardía.

De la primera cosecha de olivo se ha realizado un análisis físico-químico del aceite obtenido, del cual se destaca el alto porcentaje de ácido oleico (0,22), el cual es notablemente superior a los aceites obtenidos de diferentes zonas olivícolas de la Argentina. La caracterización del producto otorga una diferenciación en calidad, que se suma a una denominación de origen como es Patagonia.