El MOZ sumó una nueva especie de reptil marino, proveniente de la Formación Vaca Muerta. Se trata del Catutosaurus gasparinae, designado así por su procedencia: Los Catutos y en honor a la paleontóloga argentina Dra. Zulma Gasparini. El espécimen fue donado en 1985 por José Mallid Jalil.
El Museo Olsacher de Zapala (MOZ) continúa ampliando su colección de fósiles. Recientemente sumó una nueva especie de ictiosaurio –reptil marino- denominado Catutosaurus gasparinae, proveniente de la Formación Vaca Muerta.
Hace varios años el material se encuentra depositado en el MOZ. Se trata de un ejemplar casi completo que, por su excelente grado de preservación, permanece en las salas de exhibición del Museo y es una de las principales piezas de atracción. Recientemente ha sido reestudiado bajo la dirección de la Dra. Marta Fernández, del Museo de La Plata.
Respecto a la pieza, el director del MOZ, Alberto Garrido, indicó que “sumar nuevos holotipos al museo es una gran satisfacción, es un gran logro institucional ya que enriquece las colecciones a nivel científico”. Y agregó: “En este caso se demuestra que el estudio de los fósiles es dinámico, constantemente se van reestudiando fósiles cuando los casos así lo ameritan, y también eso nos permite afinar algunos conceptos”.
Garrido destacó la colaboración entre el Museo de La Plata y el Museo Olsacher de Zapala, al comentar que “desde hace varias décadas están trabajando en conjunto y muy específicamente con reptiles marinos”.
Cabe destacar que el trabajo fue publicado la semana pasada en la revista científica Journal of Vertebrate Paleontology, en el cual participó Garrido, como parte del Museo Provincial de Ciencias Naturales “Prof. Dr. Juan A. Olsacher” que depende del Ministerio de Energía y Recursos Naturales, la Dra. Marta Fernández y el Lic. Lisandro Campos de la División Paleontología Vertebrados del Museo de La Plata, el Dr. Erin Maxwell del Museo Estatal de Historia Natural de Stuttgart (Alemania), y el Centro de Investigación en Geociencias de la Patagonia – CIGPat (Universidad Nacional del Comahue).
El hallazgo en una cantera minera
Según los registros, el espécimen fue donado por el ciudadano José Mallid Jalil en el año 1985, quien en su momento era titular de la cantera de piedra laja en la zona de Los Catutos, al suroeste de Zapala. En 1960, la familia Jalil -reconocida en el sector minero- empezó a extraer este tipo mineral y en 1969 instaló la primera cortadora de piedra laja.
Al respecto, Garrido, resaltó que “no deja de ser un hecho loable de la persona que hizo esta donación ya que pondera la responsabilidad que tiene que tener la población ante el hallazgo de restos fósiles”.
Antecedentes
En 2013 se realizó un estudio completo de la pieza y los investigadores lo atribuyeron a un ejemplar juvenil de oftalmosáurido: una familia de ictiosaurios que poblaron las aguas de los antiguos mares jurásicos alrededor del mundo.
Los avances en el conocimiento de estos antiguos reptiles marinos permitieron que -en este nuevo estudio- se reconozca y defina a este ejemplar como un nuevo género y especie. Su nombre genérico hace alusión a su localidad geográfica de procedencia: Los Catutos; en tanto su epíteto específico se estableció en honor a la Dra. Zulma Gasparini, paleontóloga argentina de amplio reconocimiento mundial y que desarrolló numerosos trabajos en el ámbito de la Cuenca Neuquina.
El nivel de procedencia de Catutosaurus, corresponde a depósitos de las denominadas “calizas litográficas” del Miembro Los Catutos, perteneciente a la Formación Vaca Muerta con una edad adjudicada al Jurásico Superior.