El vicegobernador Mariano Arcioni quedará al frente del gobierno provincial, tras el fallecimiento del gobernador Mario Das Neves.

Arcioni resultó electo diputado nacional en los comicios del 22 de octubre por la lista “Chubut para Todos”.

A raíz del fallecimiento de Das Neves, la situación de Arcioni cambia sustancialmente. Antes de la votación se había sugerido que la postulación del vicegobernador era testimonial, algo que el mismo político había negado.

Surge así una situación institucional inédita, ya que la Constitución de Chubut fija que en caso de fallecimiento del gobernador, sus funciones serán desempeñadas por el vicegobernador por el resto del período (artículo 150). En caso de impedimento o ausencia del vicegobernador (por fallecimiento, destitución o renuncia) el Poder Ejecutivo debe ser ejercido por el vicepresidente primero de la Legislatura (artículo 151).

En la provincia nunca había fallecido un gobernador a cargo, por lo que si bien existe jurisprudencia en los citados artículos de la Constitución, no existe un antecedente y la Carta Magna tampoco determina si la asunción del vice es automática o necesita una nueva jura.

En ese sentido hay que decir que en la sesión de la Legislatura de mañana, más allá del dolor y la congoja, algunos diputados podrían plantear que se realice una sesión especial, con juramento incluido, con la que se apuntalaría el traspaso de poder que hoy se efectuaría tan sólo a partir de un acta notarial del escribano de Gobierno.

Arcioni tiene sólo dos caminos: renunciar a la banca de diputado y asumir el gobierno, o renunciar a la vice e irse al Congreso, lo que parece más difícil.