La gobernadora Rosana Bertone encabezó el acto central en  Tierra del Fuego por el 166° aniversario del fallecimiento del Libertador Don José de San Martín, realizado en el Gimnasio de la Policía Provincial “Sargento 1° Salvador Molina” de Ushuaia.
 
La Mandataria ponderó la figura del “Padre de la Patria”, de quien subrayó “a la edad que nuestros jóvenes comienzan la escuela secundaria, él comenzaba a ser parte de un ejército en guerra casi permanente y a los 15 años ya era oficial ascendido por su desempeño y valentía, con mando de tropa y dando batalla a los franceses”.
 
Tras señalar que “su carrera como militar en España fue brillante”, la titular del ejecutivo fueguino observó que a pesar de que “sólo lo esperaban halagos y poder en el Reino, volvió al Río de la Plata para nacernos como Patria, cosa que hizo a costa de soledad, de intrigas de poder, envidias, faltas de recursos, injusticias y hasta de calumnias”.
 
Bertone resaltó que el General San Martín “es un hombre que trasciende definiciones y batallas, que decidió ser libre y que lo llevó a cabo” y que “con él lo hizo todo un pueblo”.
 
“Se hizo cargo del maltrecho Ejército del Norte, formó el ejército de los Andes, liberó a la Argentina, a Chile y a Perú; se transformó en un hombre de trascendencia continental sin haber querido serlo”, destacó.
 
La Gobernadora expresó su “agradecimiento a la Asociación Sanmartiniana de Ushuaia, con la que trabajamos mucho en el programa que lleva adelante, recorriendo las escuelas para contarle a los niños quién fue San Martín, cuál fue su lucha y su historia”.
 
Bertone pidió “que recordemos al hombre culto y moderno, imbuido de las ideas más revolucionarias de su época; al hombre sensible, que amó tanto a su hija que ahora todos la recordamos por su nombre: Merceditas; al extraordinario militar cuyos hombres siguieron hasta cruzar los Andes; al estratega, cuyas batallas se estudiaron en las academias militares más importantes del mundo; al libertador, porque no hay nada más maravilloso que se ser reconocido como dador de libertad”.
 
“Fue un hombre que tuvo ideas políticas claras y convicciones profundas” valoró la Gobernadora, y a pesar de que “el centralismo muchas veces eligió pelear contra él y no junto a él; que sufrió penurias y necesidades junto a sus hombre y tuvo autoridad más allá de su rango; pero también tuvo críticas despiadadas y nunca bajó los brazos”.
 
Tras resaltar que “su lucha generosa nos dejó una patria, un pueblo libre, sueños y realidades”, la Jefa de Estado fueguino reconoció que “es nuestro deber plantearnos qué hemos hecho con su herencia de gloria y honor” porque “hemos puesto su nombre a calles, a plazas, a hospitales y bibliotecas de todo el país, pero en mi humilde opinión, no hemos cuidado esa herencia de gloria como se merecía”.
 
“Estoy segura de qué podemos hacerlo y lograr lo imposible: cruzar montañas, soportar las inclemencias de todo tipo y hasta ignorar la crítica de los que nada hacen en pos de la felicidad de un pueblo”, sostuvo, para señalar que “se trata de tener coraje y de ser honestos y les aseguro que juntos podemos alcanzar estas virtudes que le sobraban al General San Martín”.
 
Del acto participaron también el vicegobernador Juan Carlos Arcando, integrantes del gabinete provincial, autoridades municipales, del Poder Judicial, Fuerzas de Seguridad, establecimientos educativos, organizaciones no gubernamentales, entre las que se destacó la Asociación Sanmartiniana, y público en general.